Verdad Desaparecida


Por ratos el tema de las violaciones a derechos humanos en el pasado salvadoreño me resulta una espina que no me deja avanzar. En el ámbito de sociedad, la gente que trabaja estos temas los maneja bien en el discurso y otros han sido víctimas directas de esa barbarie.
Pero nadie trasciende, él único que lo hizo --porque era grande y era un genuino soñador-- es Jon de Cortina. ¿quién no lo vio alguna vez como lo ponía la indignación, se transformaba! fue amante del fútbol, de la sencillez. El es para mí un modelo, no porque sea cura, jamás tendría vocación de monja (a parte que no las quiero) sino porque es un defensor de derechos humanos de verdad. No fue abogado, pero manejaba la ley, no era activista por definición pero fue líder, criticaba pero para proponer.
Hoy se celebra el día internacional de las personas desaparecidas y en mi país, aun no se enjuicia a nadie por este delito contra la humanidad.
A esas líneas, más palabras le sobran. Pero se puede resumir en un palabra: IMPUNIDAD.
¿tanto pesa un militar? ¿tanto pesa un ex guerrillero? ¿cuanto pesa el dolor? ¿qué tienen para decirle a los familiares?es injusto.
Y ¿cómo carajo se cree que va haber cohesión social?
Cortina trazó bien la ruta, ya ha gente que se apartó de ella. Pero allí está y lo recuerdo porque seguro que lo que no paarecen ya lo encontraron a él.
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Comentarios

Anónimo dijo…
¿No será que una de nuestras más arraigadas tradiciones es la de la impunidad?

Mis bisabuelos conocieron la impunidad, mis abuelos conocieron la impunidad, mi padre conoció la impunidad, yo también la conozco y paro de contar.