Mariposeando.....

con Puccini, por supuesto.


Me encantò esta recreación de Madam Butterfly. Mi hija la ha visto varias veces. Yo me quedo ida, mirándola. Esa mujer, ese personaje, me conmueve.

Es como abrazar causas: aguardás por ellas. Queres ser leal a ellas, aunque se vean lejanas.

Pero luego te parecen inalcanzables y entonces ¿qué haces? si detestas las dagas!

Hay cosas que decepcionan. Como dice Aldebarán: estas frente a tu silla ¿te vas a sentar? o caminás?
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Mi hija me mira, y ve que escribo "mi hija me mira"..... le explico y me dice: yo no entiendo, solo se que quiero ser como vos sos.

¡ah! caraja. caminemos pues...

Comentarios

Aldebarán dijo…
Silvio pone una condición para las sillas:

"el que siga buen camino tendrá sillas / peligrosas que lo inviten a parar"

Preocupate si no aparecieran las sillas. Sé que a veces el cansancio pesa, y mucho, pero eso pasará. Ten a mano tu bálsamo de fierabrás, por si acaso. De todos modos, parece que tienes la mejor compañía posible en tu camino: Ixbá.

Un saludos para ambas.